divendres, 4 de desembre del 2009

Eliminar la marginación



Los seres humanos somos la única especie a la que nos conmueve el mal ajeno, nos aflige las desgracias de los demás, incluso las muy distantes, pero también nos contagiamos de la risa sincera de alguien que vemos a miles de kilómetros. La solidaridad y la empatia ha sido una de las características definitorias de nuestra especie. Una táctica de autoprotección, de apoyo mutuo, de colaboración, que ha sido clave para nuestra subsistencia.
En esta semana se han celebrado diferente días internacionales: contra la violencia de género, el día internacional de la SIDA o el día internacional de las personas discapacitadas. Estos acontecimientos buscan refrescar la memoria colectiva, activar la solidaridad y la empatía de la colectividad para generar un mundo mejor. En definitiva, difundir a través de los medios de comunicación y de todo tipo de plataformas, una realidad que, a veces, nos es esquiva, distante, ingrata, pero no menos real.
Son muchas las personas que por diversos motivos sufren la violencia de género, arrastran el estigma de estar afectados por el virus de la SIDA o ven limitadas sus potencialidades como personas por discapacidades de todo tipo. Bien pensado, ¿quién no es discapacitado? Todos tenemos limitaciones, unas visible otras no, unas toleradas otras menos.
Creo que el objetivo principal de la sociedad es eliminar la marginación. Acoger con respecto, y en igualdad de condiciones, derechos y obligaciones, a todos los miembros del grupo. Exigirles y facilitar su participación y aportación a la sociedad, ofrecerles la posibilidad de realizar sus sueños, sin proteccionismo, ni limosnas, ni lastimas. Todos deben sumar, todos debemos sumar.
En Montcada i Reixac tenemos diferentes asociaciones que están llevando a cabo un buen trabajo de difusión de estas causas y de reivindicación de la visibilidad de esas realidades. El Grup de Dones de Can Cuiàs, Esplai per a la Dona, o el Grup de Dones de Terra Nostra realizan una labor digna de mención, dinamizando toda una oferta de actividades dirigidas a las mujeres del municipio. Recientemente, hemos creado el Pacto ciudadano contra la violencia de género donde se han adherido muchas entidades montcadensas. Las asociaciones de discapacitados de Montcada i Reixac llevan a cabo también una intensa labor de concienciación sobre una realidad que no siempre encuentra respuesta positiva en la sociedad. Entidades como la Associació de Discapacitats de Montcada i Reixac (ADIMIR), Amics de la Pedagogia Terapèutica Social, Associació de Familiars de Malalts Mentals (CEMORIBA), Associació Pro Persones Sordcegues (APSOCECAT), o la Associacio del Síndrome de RETT, son algunas de las entidades del municipio con un gran dinamismo social. Otras, como Andròmines, Fundació Engrunes o Projecte Home también realizan un trabajo de reinserción impresionante. Desde el Ayuntamiento, intentamos siempre dar el máximo apoyo posible a las iniciativas que estas entidades llevan a cabo. La responsabilidad no sólo es de la administración, sino que abarca a toda la sociedad. La concienciación de que existe una violencia de género a la que no podemos dar la espalda como si fuese un asunto privado, la realidad de que no hay que bajar la guardia contra la SIDA, aunque se haya convertido en una enfermedad crónica, lejos de la mortalidad de hace una década, o la necesidad de que los discapacitados se incorporen en igualdad de condiciones en el dinámica de nuestras sociedades, nos obliga a seguir luchando contra la marginación que esta situación provoca. Como dice el título de esta reflexión, eliminar la marginación debe ser el objetivo número uno de todos nosotros.